Gastritis

Protocolo para la gastritis: se trata de una guía general y no sustituye al consejo médico, especialmente si existe sospecha de úlcera, hemorragia digestiva o infección por Helicobacter pylori.

Objetivos del Protocolo

  1. Reduce la inflamación y protege la mucosa gástrica.
  2. Disminuye la acidez excesiva sin bloquear completamente la digestión.
  3. Eliminar toxinas y reducir el estrés oxidativo.
  4. Favorecer la cicatrización de la mucosa.
  5. Control de los factores desencadenantes, incluido el H. pylori.

Medidas dietéticas

🔹 Alimentos recomendados

  • Sopas y caldos ligeros, sin frituras.
  • Plátanos, manzanas maduras, peras, arroz, patata hervida o asada.
  • Yogur natural o kéfir (salvo intolerantes a la lactosa).
  • Carne magra (pollo, pavo, pescado) preparada hirviendo o al horno.
  • Infusiones calmantes: manzanilla, tila, caléndula.

🔹 Alimentos que debes evitar

  • Café, alcohol, bebidas gaseosas.
  • Patatas fritas, alimentos muy grasos, comida rápida.
  • Cítricos y tomates crudos (alta acidez).
  • Especias picantes (pimienta, guindilla).
  • Chocolate, menta (pueden agravar el reflujo).

🍵 Consejo útil: una cucharadita de miel por la mañana, en ayunas, puede aliviar la mucosa del estómago.

Zeolita

Función: protección, desintoxicación y reducción de la acidez.

  • Dosis inicial: el primer día 1 cápsula de Zeolit Spectrum y aumentar 1 cápsula cada día, hasta llegar a 6 cápsulas al día (3 por la mañana y 3 por la noche)
  • Duración mínima: 4-6 semanas
  • Importante: administración separada de la medicación (mínimo 2 horas)

Otros complementos útiles

1. Para la cicatrización de la mucosa

  • L-glutamina - aminoácido que restaura la integridad de la mucosa: 5 g de polvo disueltos en agua, por la mañana en ayunas.
  • Extracto de regaliz deglicirrinizado (DGL): 300 mg 15 minutos antes de las comidas: efecto calmante y protector.

2. Reducir la inflamación

  • Vitamina D3 + K2 + magnesio: ayuda a regular la inmunidad y la cicatrización.
  • Omega-3 liposomal: efecto antiinflamatorio sistémico.

La zeolita puede ser beneficiosa en la gastritis a través de varios mecanismos:

1. Neutralizar el exceso de ácido estomacal

  • Reduce la acidez local sin bloquear completamente la secreción ácida, como hacen los inhibidores de la bomba de protones, lo que provoca una disminución de la acidez y el dolor epigástrico, pero sin alterar la digestión a largo plazo.
  • Acción suave, no suprime completamente la acidez estomacal, por lo que la digestión sigue siendo funcional

2. Efecto protector sobre la mucosa gástrica

  • La zeolita tiene una textura fina y la capacidad de formar una capa protectora en la superficie de la mucosa inflamada, que actúa como un "apósito gástrico", reduciendo la irritación causada por el ácido, los alimentos o los medicamentos.
  • Efecto similar al de los alginatos o el sulfato de bismuto, pero completamente natural.
  • Este efecto es muy útil en las gastritis erosivas o asociadas a reflujo.

3. Fijación de toxinas y radicales libres

En la gastritis, la inflamación está alimentada por toxinas bacterianas (de Helicobacter pylori u otras bacterias) y radicales libres.

La zeolita adsorbe:

  • toxinas bacterianas, incluido el amoníaco producido por H. pylori,
  • radicales libres,
  • algunas moléculas inflamatorias.

Esta acción reduce el estrés oxidativo y la inflamación local, favoreciendo la cicatrización de la mucosa.

4. Efecto indirecto sobre H. pylori

La zeolita no es antibiótica, por lo que no mata directamente al H. pylori, pero puede hacerlo:

  • reduce el entorno favorable para esta bacteria al disminuir el amoníaco,
  • mejorar la eficacia del tratamiento clásico,
  • reduce los síntomas aunque no se erradiquen completamente las bacterias.